La gastronomía del Baix Empordà es una expresión viva de la riqueza natural y cultural de la comarca. Nuestra zona es conocida por la variedad de productos autóctonos de gran calidad, así como por la combinación única de cocina de mar y montaña que la caracteriza.
A continuación, detallamos algunos ejemplos de los productos locales y de calidad:
- Gamba de Palamós: Con su textura firme y sabor incomparable, la gamba de Palamós es uno de los mariscos más valorados de la zona.
- Brunyols del Empordà: Estos brunyols dulces son tradicionales de la Semana Santa y se pueden encontrar en muchas pastelerías de la comarca.
- Arroz de Pals: Utilizado en muchos platos típicos de la región, el arroz de Pals es apreciado por su textura y capacidad de mantenerse poco hecho.
- Recuits del Empordà: Un tipo de queso fresco elaborado con leche de oveja o de cabra, ideal para acompañar con azúcar o miel.
- Erizo de mar: Un marisco auténtico de la Costa Brava, apreciado por su sabor intenso y único, ideal para comer fresco o como ingrediente en platos más elaborados.
A continuación, os proponemos algunas de las recetas que no os podéis perder:
- Pollo con cigalas: Un ejemplo perfecto de la cocina de mar y montaña.
- Suquet de pescado: Preparado con el arroz de Pals, este plato es un clásico de la cocina empordanesa.
- Es Niu: Plato típico de Palafrugell, un plato tradicional que combina bacalao, tripa de bacalao, pies de cerdo y huevos duros.
- Peixopalo: Bacalao seco que se recupera para hacer guisos, típico de la gastronomía empordanesa.
Existen diferentes espacios dedicados a la gastronomía, como el Aula Gastronómica del Empordà y el Espacio del Pez, donde se promueven actividades como talleres, visitas guiadas y showcookings para todos los públicos. Estos espacios no solo fomentan la cocina local, sino que también educan sobre la sostenibilidad y los valores culinarios de los productos de la región.
El vino es un elemento indispensable ya que nos encontramos en una de las regiones vitivinícolas más antiguas de la península, con una tradición que se remonta a la época romana.
Las variedades de uva que se cultivan en la zona son:
- Garnacha: Tanto en su versión blanca como negra, es una variedad muy versátil que se utiliza para elaborar vinos tranquilos y dulces.
- Cariñena: Otra variedad tradicional que aporta estructura e intensidad a los vinos tintos.
- Macabeo: Utilizado principalmente en vinos blancos, destaca por su frescura y aromas afrutados.
- Moscatel: Variedad aromática que se utiliza para vinos dulces y moscateles.
Estos vinos son ideales para maridar con la cocina local, creando una experiencia gastronómica completa y auténtica.
Que no te lo cuenten... vive la experiencia culinaria desde el corazón de la Costa Brava.