Bien entrada el otoño, una estación de colores y contrastes. Las noches empiezan a alargarse y predomina la humedad...Parece que el tiempo está cambiando y el clima que nos rodea a menudo no se corresponde con la estación que en la que nos encontramos. ¡Todos estos cambios y nuevas sensaciones también las notan los animales e incluso las plantas! Árboles que las hojas no acaban de caer cuando toca o lo hacen antes de tiempo, ¿y qué ocurre con la fruta? La que es de temporada se adelanta... ¡Todo depende de este tiempo de locos!
Si visitas el bajo ampurdano, verás los viñedos y podrás vivir la vendimia o probar alguno de nuestros vinos 😉, resultado de todos estos cambios metereológicos.
Si decides pasear en medio del pueblo de Calonge descubrirás una representación en 3D de lo que podría parecer una de las obras del pintor Holandés Mondrian.
Esta pintura se levanta rodeada de cepas de diversas variedades y si eres amante del arte contemporáneo lo distinguirás enseguida. Es un reconocimiento que la población de Calonge ha querido dar a nuestra cultura vinícola arraigada en esta tierra desde hace siglos. Lo que ha hecho que proliferen diferentes bodegas, una de las cuales os hablamos a continuación.
Fue en el siglo pasado cuando una pareja Franco🇫🇷-Belga🇧🇪 se enamoró de estas tierras y, con el asesoramiento de expertos enólogos franceses, plantaron variedades 🍇 no autóctonas para crear cada año un vino único en función de los giros temporales de las estaciones en esta tierra tocada por la tramontana🌬. Es por este motivo que el vino de la Bodega Clos de Agon (Mas Gil) es singular, basado en el lugar donde se produce y las circunstancias climáticas de cada año.
La gran incógnita es cómo será el resultado... ¿cómo será el vino resultante de estos meses tan calurosos y escasos de precipitaciones?